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OCCIDENTE UNIVERSITARIO
N° 92(Ver todos los números)

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Publicación informal, editada en la UNIVERSIDAD FRANCISCO DE PAULA SANTANDER

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Director: JAIRO CELY NIÑO l 8 pp (la edición en papel) l Viernes 27 de Junio del 2008
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EN ESTA EDICIÓN :
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A MODO DE «EDITORIAL (O DE ALGO ASÍ)».
EL FIN DEL MUNDO.
UN HERMOSO HOMENAJE AL CULO.
CONOCIENDO A INTERNET.
ROSA PARKS E IRENE MORGAN.



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A MODO DE «EDITORIAL» (O DE ALGO ASÍ).


Ayer, jueves 26, «el suscrito» Director calculó que no tendría tiempo de garrapatear algo A modo de «Editorial (o de algo así)» para la presente edición 92, en razón del ineludible jornaleo de notificar personalmente a sus estudiantes del resultado de sus exámenes finales y la calificación definitiva, además del de atender el eventual reclamo que tuviese cada uno.
Pero hay cosas que suceden como obedeciendo a un extraño sincronismo. Porque la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia acababa de condenar a la ex congresista Yidis Medina por venderle su voto al gobierno de Álvaro Uribe Vélez para que éste pudiera ser reelegido Presidente, y ocurrió que poco después del mediodía un egresado de Ingeniería Civil, coetáneo del «suscrito» Director, le obsequió a éste una fotocopia de la página 91 de la edición de la revista Semana del lunes 2 de junio de este año, con el texto del artículo EL ZORRERO RECICLADOR, del columnista ANTONIO CABALLERO, que «viene como anillo al dedo» para reproducirlo A modo de «Editorial (o de algo así)»:

«El gobierno de Álvaro Uribe, que fue elegido y reelegido Presidente para luchar contra la corrupción y la politiquería —o al menos prometía eso, y hubo quien se lo creyó— ha resultado posiblemente el más politiquero y el más corrupto, y, lo que es más grave, el más corruptor que haya tenido Colombia en los últimos cien años. Y no es fácil, porque la competencia es dura.
»Sin embargo dice Uribe que él “persuade, pero no compra conciencias”. De las conciencias no opino, porque cada cual conoce sólo la suya propia: y hasta el ex presidente Andrés Pastrana negó que hubiera vendido la de él cuando se volvió entusiasta pero fugazmente uribista mientras le duró el cargo de embajador en Washington. Pero a Uribe sí le hemos visto comprar todo lo demás, muchas veces en público. Ha comprado elecciones y reelecciones, ha comprado falsos atentados con bomba, ha comprado lobby para su TLC en el Congreso de los Estados Unidos, ha comprado información de inteligencia, ha comprado manos humanas cercenadas. Me recuerda a esos zorreros que pasaban en mi infancia por las calles de Bogotá gritando:
»—¡Boteeellas, trastos, papeeel..!
»Y de las puertas salían las Yidis y echaban en la zorra cartones y periódicos viejos, bombillas fundidas, un Teodolindo o dos: lo que sobrara en la casa.
»Los zorreros de ese entonces no pagaban: se limitaban a llevarse desperdicios y cachivaches inútiles como un servicio gratuito (pues esto era antes, claro, de que el alcalde Andrés Pastrana descubriera el negocio de la privatización de la recogida de basura). Uribe, en cambio, sí paga lo que corrompe, y lo hace con los recursos del Estado. Paga con consulados, con contratos de obras públicas, con terceros canales de televisión. En los consejos comunales paga con cheques, no sé si postdatados, del Banco Agrario o del Banco de las Oportunidades, que entrega personalmente ante las cámaras. Pagó el voto —o, más elocuentemente aún, la ausencia de voto contra su reelección— del congresista Teodolindo Avendaño con una notaría.
»Y no es cosa de poca monta una notaría, aunque haya sido necesario crear tantas para agradecer favores recibidos. Una notaría no es una fruslería sin importancia, como, digamos, las frecuencias de radio que les regalaba Samper a los periodista amigos y estos a continuación revendían sin complejos a alguno de los dos grandes magnates de la radiotelevisión. No: un notario es nada menos que el guardián de la fe pública. Y qué fe pública puede quedar en un país cuando un politiquero recibe una notaría como parte de pago de su voto en el Congreso para quebrarle una vértebra a la Constitución a favor de un presidente y al día siguiente la revende a plazos, por cuotas de 120 millones de pesos. Se ve que ha dejado honda huella aquel superintendente de Notariado y Registro, doctor Cuello Baute, compadre o ahijado o padrino del presidente Uribe, que subastaba notarías a cambio de vacas para su finca. Qué compadres escoge este Presidente que tenemos. Qué notarios nombra (algunos, primos suyos). Qué amigos tiene.
»Y nos dicen las encuestas de opinión que un 84 por ciento de los colombianos respalda al Presidente que hace estas cosas, y tal vez por hacerlas. Pero no lo creo. No creo que haya sido posible corromper a tal grado la conciencia de este país. Creo más bien que esas encuestas están compradas.»

Tres notas del «suscrito» Director:
Si «Al cliente hay que darle la razón», ¿no implica eso que una encuesta la gana quien la paga?
 Con la condena contra Yidis Medina, la Corte Suprema ha castigado a la que ha cobrado por pecar. ¿Castigará la Fiscalía a los que le pagaron por pecar?
Con la condena mencionada queda en evidencia lo espurio del Acto Legislativo que reimplantó la reelección presidencial con nombre propio y con la gabela de inmediata. n


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El fin del mundo

GUILLERMO CARRILLO BECERRA,
profesor Asociado emérito de la UFPS.
gecarril60@yahoo.es

Cuando se acercaba el fin del siglo XX, fueron muchas las cábalas que se hicieron acerca de los acontecimientos catastróficos que ocurrirían con motivo del cambio de milenio. Desastres, tragedias, Apocalipsis. En fin, nadie se escaparía de un destino marcado por el castigo. ¿Qué ocurrió? Nada distinto a lo cotidiano. El mundo siguió igual, con todos sus defectos y cualidades. Para burlarnos un poco de los agoreros, miremos lo que el autor CHARLES BERLITZ escribió cómo fueron los hechos de la vida real cuando el mundo cumplió el primer milenio después de Cristo, pues la idea generalizada era la de que el mundo se acabaría.

«Al llegar diciembre del año 999, la psicosis y el fanatismo de las masas parecieron brotar también del lado sombrío de la naturaleza humana. Grupos de flagelantes erraban por el campo, azotándose unos a otros y reuniéndose en las plazas de los pueblos, donde dejaban rastros de sangre que llegaban hasta las puertas de las iglesias. En algunos lugares se formaban masas que gritaban pidiendo, y a veces obteniendo, la muerte de los mercaderes ricos, los usureros y los magos, para que después de la ejecución de esos odiados seres los habitantes del lugar pudieran informar al Ángel del Juicio que aquellas tierras estaban libres de impíos. Hubo una ola de suicidios de personas que querían castigarse a sí mismas anticipándose al fin del mundo, o que sencillamente no podían resistir la presión de esperarlo.
»Pasó la Navidad en un desbordamiento de piedad y de amor. Las familias sentían renovados vínculos de cariño, y los que se querían procuraban estar siempre juntos en las horas finales. Los animales domésticos quedaron liberados al prepararse sus propietarios para la muerte y el Juicio Final. Algunos de esos animales erraban por el campo, pero otros se quedaron cerca de los establos. Los caballos liberados en los pueblos trotaban de acá para allá hasta llegar a las puertas del pueblo. Allí los centinelas les dejaban pasar, y ellos se marchaban en busca del campo abierto. La rutina de la vida rural desapareció, pues las oraciones se tomaron el tiempo del trabajo. Las tiendas de alimentos y las panaderías regalaban sus mercancías y rehusaban las monedas que los clientes les pagaban. Los inválidos y los agonizantes de los hospitales pedían que les sacaran al aire libre para poder ver en persona a Cristo bajando de los cielos.
»La gente se perdonaba las deudas mutuamente; los maridos y mujeres se confesaban infidelidades, sospechadas o no, y se entendían; los que habían robado en los dominios de los señores lo confesaban a éstos y luego, pedían perdón. El comercio entre aldeas y pueblos quedó interrumpido; se descuidaban las viviendas, dejándolas arruinarse. Los mendigos eran generosamente alimentados por los más afortunados; los condenados por delitos quedaban liberados de la prisión, aunque algunos querían seguir encarcelados, exclamando que deseaban expiar sus pecados antes del fin. Obedeciendo directamente el Evangelio, los ricos regalaban a los necesitados sus espléndidos ropajes. (“Si alguien te pide tu túnica, dale también el capote”.) Las iglesias, los monasterios y los conventos estaban asediados por multitudes que pedían confesión y absolución.
»Al aproximarse la noche del 31 de diciembre del año 999, el frenesí general alcanzó nuevas cumbres. En Roma, la inmensa basílica de San Pedro estaba atestada en la misa de medianoche, que muchos creían que sería la última misa a la que asistirían en la Tierra. El papa Silvestre II se irguió ante el altar mayor. La iglesia estaba rebosante y todos se habían arrodillado. El silencio era tan grande que se oía el roce de las mangas blancas del papa al moverse en torno al altar.
»El Sumo Pontífice era un hombre de férreo poder de voluntad, tranquilo y concentrado. No se movía ni le temblaban las manos. Había dicho la misa de medianoche, y reinó un silencio mortal. Los presentes esperaban... El papa Silvestre no dijo una palabra. Parecía sumergido en oración, con las manos elevadas al cielo. El reloj seguía su tic-tac. Un largo suspiro se elevó del pueblo, pero no pasó nada. Como niños con miedo a la oscuridad, todos los que estaban en la iglesia yacían con el rostro en el suelo, y no se atrevían a levantar los ojos. Sudor de miedo cubría muchas frentes heladas, y las rodillas y los pies perdieron toda sensibilidad. Entonces, de repente, ¡el reloj cesó en su tic-tac!
»Entre los asistentes empezó a formarse en muchas gargantas un grito de terror. Y, muertos de miedo, varios cuerpos cayeron pesadamente en el piso de piedra. Entonces el gigantesco reloj empezó a dar campanadas. Una, dos, tres... dio doce. Esta última se extinguió en ecos ¡y siguió reinando un silencio de muerte!
»Entonces el papa Silvestre se volvió al frente y con la orgullosa sonrisa de un vencedor extendió las manos en bendición sobre las cabezas de los que llenaban la iglesia. Y en ese mismo momento todas las campanas de las torres comenzaron un alegre y jubiloso repique, y desde la galería del órgano empezó a sonar un coro de preciosas voces, jóvenes y de mayores, un poco inseguras al principio, pero haciéndose más claras y firmes por momentos. Todos los presentes unieron sus voces a las del coro. Terminado de cantar el Te Deum, hombres y mujeres cayeron unos en brazos de otros, riendo y llorando e intercambiando el beso de paz. Así terminó el primer milenio de la era cristiana.
»No mucho después de pasar el gran susto de su vida, la gente reanudó su ritmo normal; eso sí, cada uno reclamando sus pertenencias: mercancías, ganados, viviendas, deudas.
»Posteriormente, otros acontecimientos se han señalado como indicaciones de un inminente fin del mundo. Entre ellos la peste negra, que produjo una mortandad de 30 a 35 millones de personas; es decir, un tercio de la población europea, en el siglo XIV. Fue tanto el sufrimiento de esa gente que a los supervivientes, abrumados por las escenas de horror y la locura danzante de las multitudes errantes, les pareció que estaba cerca el fin del mundo.
»Los europeos, recuperados de esas amenazas de la edad media, pronto llegaron a ser por su parte una fuerza capaz de acabar con el mundo, tras el descubrimiento de América, al caer sobre la población indígena del Nuevo Mundo, casi aniquilándola con espadas, armas de fuego y enfermedades.
»Ninguno de esos sucesos, sin embargo, ha afectado seriamente la constante proliferación de la humanidad. Desaparecen naciones y surgen otras nuevas, se desarrollan nuevos pueblos y clases sociales, cambian las formas de vida y los medios para sustentarla, pero la humanidad, a pesar de nuevas guerras y del aumento del hambre y las nuevas enfermedades, ha crecido constantemente. Mientras que no ha habido “un fin del mundo” esperado por todos desde que nuestras técnicas científicas se han perfeccionado en los últimos 100 años, es más bien irónico que ese mismo dominio técnico pueda ser la causa y también el anuncio de un futuro fin del mundo, más real que el imaginado colectivamente por nuestros ancestros del primer milenio.»
(Cúcuta, junio de 2008)


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Un hermoso homenaje al culo

RICARDO GARCÍA RAMÍREZ,
profesor Titular emérito de la UFPS.
cardingarcia@hotmail.com

El martes 15 de enero de este 2008 me llamó la atención un documental de History Channel sobre esa parte de la anatomía humana donde la espalda pierde su casto nombre. Que es la más carnal del cuerpo, tanto por lo que usted está pensando, como por ser la única que rotunda y definitivamente está marginada de la osamenta.
El documental mostraba cómo durante el último trimestre del 2007 y el primero del 2008, en las galerías y en los museos europeos se exhibirán los cuadros y las esculturas inspirados por esa parte del cuerpo humano llamada “culo”, a la cual, tratándose del suyo, ridículamente algunos le dicen “pompis” y otros le dicen “trasero” o “rabo” (como si un hombre fuera cometa de juguete o burro, para tener “rabo”), algunas denominan “derriere” o “cola” (como si una fémina fuera culebra o yegua, para tener “cola”) y los bolañeros le dicen “jopo”, pero que Don Quijote y sus paisanos (los españoles) le dicen escuetamente: “culo”.
Según el documental, en el Museo del Prado, de Madrid, se están exhibiendo 28 óleos de Diego Velásquez titulados: Fábulas de Velásquez: mitología e historia sagrada, en donde la obra más importante es La Venus del espejo, que la Galería de Londres le prestó al museo.
En esta obra aparece Cupido maniatado al lado de una robusta Venus que se mira al espejo mientras le muestra a Eros su llamativo y suculento culo. Este óleo es el primer desnudo completo de la pintura hispana que nos muestra un hermoso y voluminoso culo, y, si la Iglesia no incineró o al menos vetó tanto a la obra como al artista, fue por la prestancia de éste, quien ¡con razón maniató a Cupido!
En el Museo de Viena (Austria), según el documental, se están exhibiendo 60 óleos de Tiziano, de los cuales el más llamativo es La Ninfa y el Pastor, que muestra a un joven pastor tocando una flauta mientras la ninfa le muestra su portentosa retaguardia como con cierto desprecio o desencanto; como si estuviera arrecha, ya porque el mozuelo no sabe tocar la flauta, ya porque sí pero a ella no le gusta la melodía esa, o bien porque el chamo le está jalando al arte en vez de jalarle a la sodomía.
Rusia, según el documental, compite con Madrid y Viena: el Museo del Hermitage, de San Petersburgo, presenta un adorable trío de culos. Se trata de Las tres Gracias, escultura en mármol del italiano Antonio Canova, de quien uno de sus críticos dice que es el único escultor que puede transformar la piedra en neumáticos, por la dimensión aérea que le da a esos despampanantes culos esculpidos con tanta armonía y delicadeza, que parecen de otro mundo. La crítica, en general, califica esos culos como las figuras más sensuales de la escultura.
El documental pasa después a Roma, concretamente a El Vaticano y específicamente a la Capilla Sextina, en donde se muestra uno de los culos más insólitos del arte universal. Se trata del culo de Dios, que desde la bóveda celestial se muestra irreverente a los visitantes.
Este culo del Creador fue creado por Miguel Ángel, aprovechando que el Papa lo contrató para pintar los frescos de La Capilla. Como era atrevido, irreverente e iconoclasta, Miguel Ángel decidió pintar al Padre Eterno de espalda, mostrando su divino culo en el fresco La Creación de las plantas. El artista se hizo el toche y le pintó la túnica corriéndose indiscretamente, de modo que se le vieran sus dos divinas y sonrosadas nalgas.
Otro museo madrileño, la Fundación Canal, inauguró una colección fotográfica que muestra el culo de 67 personajes de renombre internacional. La nota de presentación de esta exposición la escribió el poeta Luis Alberto de Cuenca quien, muy a lo español, afirmó: Si los ojos son el espejo del alma, me da la sensación de que el culo puede ser el del cuerpo.
La revista dominical del diario El País, de España, dedicó a esta exposición un extenso artículo titulado: “Enseñar el culo con arte”. En este artículo dice el diario:
Allí se ven culos masculinos y femeninos, culos inocentes y exhibicionistas, culos estáticos y en acción, culos pictóricos y esculturales, culos eróticos y provocativos. No todos están desnudos; los hay cubiertos por una falda ajustada, o un viejo chingue o un moderno traje de baño.
Hay culos anónimos y conocidos, como el de Marilyn Monroe. Hay culos muy chistosos. Hay culos deportivos y sedentarios. Hay muchos culos, decenas de culos, interesantes culos.
Me acuerdo que el día de mi llegada a Madrid (España), cuando era joven y bello, me di un vueltón por la Gran Vía y me impresionó un aviso de neón en uno de los almacenes de cadena llamados “Galería Preciado”, que hoy se llaman “El Corte Inglés”, pues decía: “Se hacen sillas nuevas y se les arregla el culo a las viejas”. Entonces le pregunté a un español si el aviso no era muy procaz y me respondió: ¿Por qué? ¿Acaso el culo no se llama “culo”? Desde esa vez, hace casi 50 años, me importa un culo decirle al culo: “culo”.
Y si en España, que es donde está la Real Academia de la Lengua, la cual es la que “quita y pone” normas sobre cómo hablar nuestro idioma correctamente, al culo lo llaman “culo”, ¿por qué los colombianos recurrimos a eufemismos para sacarle el culo a decirle al culo, “culo”?
Deberíamos imitar no sólo a la “Madre Patria” sino a todo el continente europeo, que con ese jurgo de “expo-culos” comenzó el 2008: ¡de culo al futuro!
(Cúcuta, enero del 2008)


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Conociendo a Internet

CARLOS HUMBERTO AFRICANO,
profesor Asociado emérito de la UFPS.
kafrica_55@hotmail.com

A algunos de mis amigotes y de mis alumnos les he oído hablar sobre un tema que por estos días está de moda debido a la gran cantidad de información aparecida últimamente sobre la televisión digital: la banda ancha en Internet. Con conceptos un tanto distorsionados les he oído confundir los términos “banda ancha” con “ancho de banda” y opinar sobre los Mb, Kb, Mbps, Kbps, MBps, KBps y enredarse más con los MHz, KHz.
De modo que me di a la tarea de investigar un poco sobre el tema con el fin de escribir un artículo para tocar los aspectos más relevantes de lo que es la banda ancha en Internet. Entre tanto documento leído saltaron otros conceptos que se salen del tema principal, pero que son importantes para entenderlo, así que resolví escribir este primer artículo sobre lo que es la Internet, para después presentarles otro sobre la banda ancha.

QUÉ ES INTERNET
Internet se derivó de la primera red de computadoras aparecida en el mundo y que se llamó ARPANET (Advanced Research Projects Agency Network). Esta red fue creada por encargo del Departamento de Defensa de los Estados Unidos a la DARPA (Defense Advanced Research Proyects Agency) como medio de comunicación para los diferentes organismos del país. El primer nodo se creó en la Universidad de California (UCLA), de Los Ángeles, y fue la espina dorsal de Internet hasta 1990, tras finalizar la transición al protocolo TCP/IP en 1983.
La ARPANET inicial consistía en cuatro nodos instalados: dos en la Universidad de California (UCLA), uno con un computador SDS Sigma 7 que fue el primero en conectarse y otro con un IBM 360; uno en el Instituto de investigación de la Universidad de Stanford, con un computador SDS 940 que fue el primero en conectarse; y uno en el Departamento Gráfico de la Universidad de Utah, con un PDP-10.
El primer enlace de ARPANET se estableció el 21 de noviembre de 1969 entre UCLA y Stanford y el 5 de diciembre del mismo año, toda la red inicial estaba lista. En marzo de 1970 ARPANET cruzó hasta la costa Este de los Estados Unidos cuando BBN (laboratorios Bold, Beranek and Newman) se unió a la red. En 1971 ya existían 23 computadoras conectadas, pertenecientes a universidades y centros de investigación. Este número creció hasta 213 computadoras en 1981 con nuevas incorporaciones cada 20 días en promedio.
Pero no voy a continuar con esta historia sobre la que hay infinidad de literatura. Simplemente quiero aclarar aquí, qué es y cómo funciona Internet.

QUIÉNES CONFORMAN A INTERNET
Cuando hablamos de Internet, nos estamos refiriendo a la red de computadoras más grande del mundo. Mejor dicho, a la red de redes de computadoras.
Cuando una red local de computadoras se conecta a Internet, como comúnmente se llama a este proceso, lo que se hace es enlazar esta red con las demás, mediante una dirección IP.
Una dirección IP es un número que identifica de manera lógica y jerárquica a un dispositivo (habitualmente una computadora) dentro de una red que utilice el protocolo IP (Internet Protocol). De modo que todas las máquinas que están conectadas a Internet han de tener un número de identificación (así como cada teléfono tiene su número para poder acceder a él). Es lo que se llama la dirección IP.
Cuando usted de manera particular pide una conexión a Internet a un proveedor de acceso, lo que hacen es que enlazan su computadora, también con una IP, a través de la red de su proveedor. De modo que estas redes forman Internet: la de su universidad, la de su proveedor, la de su empresa, las de las corporaciones y entidades. Usted mismo forma parte de Internet cuando tiene una conexión a través de su proveedor.
Ah, pero estas redes son cada una muy diferente, tanto en número y tipo de máquinas conectadas, como en los sistemas operativos usados. Sin embargo, todas comparten algo común: el medio de enlace, que es el protocolo TCP/IP.
El TCP/IP es el protocolo fundamental de Internet que Stanford University y Bold, Beranek and Newman (BBN) presentaron a comienzos de los años 70 para la primera red de computadoras, ARPANET.

CÓMO FUNCIONA INTERNET
Normalmente los proveedores de acceso a Internet disponen de un rango de direcciones, que van asignando a sus usuarios de forma dinámica, mediante un protocolo para asignar direcciones IP dinámicas llamado DHCP (Dynamic Host Configuration Protocol). Los proveedores de acceso a Internet (ISPs) vía ADSL, módems y cable módems usan la tecnología de NAT para que las computadoras de los usuarios posean una dirección IP, que generalmente se denomina como “privada” o “no homologada”, ya que sólo es válida para identificar a la computadora dentro del servicio de acceso, pero no directamente hacia el resto de Internet.
Las empresas, corporaciones, entidades, institutos de cualquier tipo y que pueden tener también direcciones IP, operan de la misma manera con sus usuarios que son sus empleados y allegados a sus redes.

QUIÉN MANEJA LA INTERNET
Se preguntarán a todas estas: pero, bueno, ¿quién hace posible todo esto?, ¿a quién se le pide una IP?, ¿quién otorga estas direcciones?, ¿qué es un proveedor de acceso?, ¿cómo se conectan las empresas y entidades?, ¿cómo está conectado el usuario?
Internet funciona gracias a un conjunto de organizaciones. Por un lado está la World Wide Web Consurtium (W3C). Esta organización, para decirlo de un modo gráfico, es como el gran consejo de sabios. Es la que desarrolla los estándares comunes de la web, crean los nuevos servicios, inventan nuevas aplicaciones, mejoran y renuevan los protocolos, y para ello está íntimamente ligada con los gestores de Estados Unidos, Europa y Asia. Ellos son, respectivamente, los laboratorios: del MIT; del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo, de Francia; y de la Universidad de Keio, de Japón. Además de ellos, la institución la conforman un total de 150 miembros entre universidades e institutos de investigación de todo el mundo y empresas vinculados con la industria de la informática.
Pero como todo es “democracia”, en 1992 se creó el ISCO (Internet Society), que es lo más parecido a lo que se pudiera llamar “el gobierno del pueblo” y es el reemplazo de aquel “gobierno” de la inicial ARPANET (origen de Internet) que conformaban sus inventores: (que pasaron a W3C) La UCLA (Universidad de California), Universidad de Utah, Universidad de Stanford, BBN (laboratorios Bolt Beranek and Newman), ARPA (Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados, del Departamento de Defensa de los Estados Unidos), RAND Corporation, el MIT, y NPL en el Reino Unido. Hoy, ISCO está abierto a todo aquel que quiera formar parte, pero, como en toda democracia, vaya usted a saber cómo. Pero además, a mi modo de ver y por lo que he podido averiguar, ISCO es un embeleco: es una agrupación sin ánimo de lucro que promulga políticas y promueve la conectividad global en Internet. Quien en realidad maneja la red es el anterior y, a nivel operativo, el que le sigue es la ICANN (Internet Corporation for Assigned Names and Numbers).
La IANA (Internet Assigned Numbers Authority), era la antigua Agencia de Asignación de Números de Internet donde se hacía el registro central de los protocolos Internet, como puertos, números de protocolo y empresa, opciones y códigos.
Pero, ¿cuál que la Internet es libre, abierta, democrática y, sobre todo, sin ánimo de lucro? En 1998 IANA fue sustituida por la ICANN.
La ICANN (Internet Corporation for Assigned Names and Numbers) es una organización creada y manejada por el gobierno de los Estados Unidos. Es esta organización quien marca las reglas para la localización de direcciones IP en Internet, así como para el registro de nombres de dominios. Además es quien crea y organiza los niveles jerárquicos, tanto de direcciones IP como de nombres de dominio dentro de Internet, como los niveles de enrutamiento. ICANN es el organismo que controla los 13 servidores raíz (root servers), y por tanto tiene el control de facto de todo el sistema. Es decir, que aunque hay un gobierno central (W3C e ISCO), en la práctica, en lo operativo (o por lo menos para mí), quien en realidad maneja la red es este organismo, apoyado en otros que más adelante se mencionan
La ICANN maneja directamente el sistema de direcciones IP, que son de tres clases:
Clase A: son otorgadas a los gobiernos de todo el mundo. Éstos a su vez las entregan a las redes de las dependencias propias del Estado, a las de corporaciones públicas, a las de entidades sin ánimo de lucro, a las de organizaciones civiles y ciudadanas, etc.
Clase B: son otorgadas a empresas muy grandes, generalmente vinculadas, o con razón social vinculada, o con producción en el sector de la industria informática o afín con ella. Éstas, a su vez, ceden direcciones a empresas más pequeñas, igualmente vinculadas con el sector industrial informático.
Clase C: es para todos los demás solicitantes.
Pero a partir de aquí, la clase dominante es la B. En ella es donde está el negocio de Internet. Para hacer posible esto se creó otro organismo: El IOPS (Internet Operators Providers Services), que se estableció en mayo de 1997 con los 9 proveedores de servicios de Internet más grandes del mundo, entre ellos, Cable&Wireless, UUNNET, GTE, PSINet, MCI WorldCom… Son los encargados del enrutamiento de la información con todos sus servicios: correo electrónico, chat, ftp, y solución a los problemas de congestionamiento en la red.
Algunas de estas grandes empresas y otras que aquí no figuran, son las dueñas de los medios de transporte de la información, como los satélites, amplios sectores del espectro electromagnético, los cables submarinos, las telefónicas. Aquellas que son dueñas del medio, y claro, para ceder direcciones IP, alquilan a las otras empresas o usan para su negocio (en el argot informático se llama el carrier, es decir, el transportador) sectores de estos medios, y éstas hacen lo mismo con otras más pequeñas, hasta llegar a su empresa proveedora de Internet (su parabólica local, su telefónica local), que en realidad es una empresa proveedora de servicios de Internet. De esto no se salvan (pues aquí todos tienen que pagar el transporte de la información) ni los de la clase A, ni los de la clase C, que aunque tengan direcciones, no tiene como interconectarse, ni ninguno de los demás humanos del mundo que quieran conectarse a internet. Aquí es donde la frase “quien domine las comunicaciones, dominará el mundo”, es totalmente cierta. Y ahora nos viene lo mismo con la televisión digital.
Queda claro que a través de Internet, las computadoras se conectan entre sí mediante sus respectivas direcciones IP. Sin embargo, para nosotros es más cómodo utilizar otra notación más fácil de recordar, como son los nombres de dominio. Esto quiere decir que las máquinas se reconocen entre sí por medio de un número, el IP; pero nosotros los humanos, que somos los que las utilizamos, las vamos a reconocer por un nombre. Por ejemplo: ufps.edu.co; cucutanuestra.com; google.com; es lo que se llama el nombre de dominio, que también es único y que cuando lo escribimos, el acceso es hacia la dirección IP donde esté alojado ese nombre.
La traducción entre unos y otros se resuelve mediante los servidores de nombres de dominio DNS (Domain Name System). El DNS es una base de datos distribuida y jerárquica que almacena información asociada a nombres de dominio en redes Internet. Aunque como base de datos, el DNS es capaz de asociar distintos tipos de información a cada nombre, los usos más comunes son la asignación de nombres de dominio a direcciones IP y la localización de los servidores de correo electrónico de cada dominio.
Para el manejo de los nombres de dominio se creó otro organismo: La Network Solutions Inc., que reemplazó a la Fundación Nacional de Ciencia de los Estados Unidos desde enero de 1993 y es la encargada de registrar los nombres de dominio de las organizaciones. Estos son los nombres con los que aparecen todas las entidades del mundo en internet y su dominio, como: .com; .net; .org; .gov; .co; etc.
Pero Network Solutions ya no tiene el monopolio para registrar nombres de dominio. La ICANN le cedió esta función de registrar dominios a otras entidades privadas y comerciales (generalmente son los mismos que disponen de direcciones IP). Así, vuelve y juega todo lo anterior de las IP, pero ahora con los nombres de dominios. De modo que el registro de dominios es el proceso por el cual una persona o una entidad (que no disponga de direcciones IP) pasa a tener el control sobre un nombre de dominio, a cambio de pagar una cuota por espacios virtuales en los servidores del registrador para poder alojar y aparecer con su propia página web y ofrecer servicios. (Sobre este tema hay toda una gama de jerarquía, niveles, clasificación etc.) Las entidades que disponen de direcciones IP cargan sus nombres de dominio sobre estas direcciones, es decir, sobre sus propios servidores (ejemplo: la UFPS), pero igualmente tiene que pagarle al carrier el transporte de la información.
Finalmente, el IETF; y no por estar de último en la lista sea el menos importante. Tal vez es el más, porque sin ellos no hay red ni conexión. Este organismo, el IETF (Internet Engeniering Task Force), es la ingeniería y la técnica de la red. Son los obreros con título, pero con mucho conocimiento. Son los que están frente a las máquinas. Son los que crean el software. Son los que manejan, crean, reforman los protocolos, los procedimientos y el funcionamiento general de Internet. Están a las órdenes de ISCO, pero son los que interpretan las ideas, las creaciones de W3C. Sin ellos no es posible la Internet.
Para terminar y concluir debo aclarar que en realidad la Internet sí es libre, abierta, democrática, sin ánimo de lucro y sobre todo, gratuita. Esto es posible gracias a que ninguno de los operadores de Internet hace su trabajo con cargo al usuario final. Así, W3C no es una sociedad anónima que saque dividendos, sus miembros no obtienen dividendos, sus investigadores cobran por su trabajo, que son sus creaciones de conectividad (por ejemplo, las últimas son la televisión IP y la wap, conexión a través de celulares), con cargo a las empresas a las que pertenecen, lo mismo ocurre con los ingenieros de IETF, de modo que toda la tecnología científica de software, de protocolos, de conectividad, es gratuita y la ponen a disposición de los usuarios. Lo mismo ocurre con los miembros de ICANN, de IOPS y de Network Solutions. Ah, y además, la mayoría de los servicios que nos ofrecen son gratuitos: correo electrónico, chat, ftp, software, juegos, música, operaciones en línea, espacios virtuales, páginas web propias, además de la razón de ser de Internet: conexión y acceso a la información. De modo que lo único que pagamos es el alquiler del medio transporte de la información, el cual, dependiendo de lo cómodo que sea, tiene su precio. Esto es el “ancho de banda”, que será el tema del próximo artículo.
(Cúcuta, junio de 2008)


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Rosa Parks e Irene Morgan

JAIRO CELY NIÑO, profesor de
la Facultad de Ingeniería de la UFPS.
jairocely@hotmail.com

En un párrafo del artículo El lento pero indetenible desmonte de la discriminación racial… por vía judicial, escrito por el autor del presente artículo y publicado en la edición Nº 91 de Occidente Universitario, se mencionó el caso de «desobediencia civil» que en 1955 protagonizó en Montgomery, capital del estado de Alabama, la dama negra Rosa Parks contra la segregación racial sudista impuesta en los medios de transporte.
Y se comentó en el párrafo siguiente que, en protesta contra el arresto de la dama, Martin Luther King, Jr. —un ministro de la Iglesia Bautista, relativamente desconocido en tal momento— lideró el boicoteo contra los buses de Montgomery, por lo cual lo encarcelaron.
Como el boicoteo —que duró 382 días— y el arresto de la señora Parks y del reverendo doctor King terminaron en 1956 cuando el Tribunal Supremo proscribió la segregación racial en los medios de transporte, al incidente se lo considera la chispa que encendió el Movimiento por los Derechos Civiles, y a Rosa Parks se la considera la Madre de dicho movimiento.
Sólo que, con tales calificaciones del incidente y de su protagonista, la señora Rosa Parks, se minimiza (¿acaso se desprecia?) un elocuente antecedente ocurrido once años antes en Gloucester (Virginia) y protagonizado por otra dama negra, llamada Irene Morgan, también dentro un bus y también por negarse a ceder su asiento a gente blanca.
Sin embargo, tan histórica omisión jamás mortificó a Irene Morgan, pues, según relató alguna vez Janine Bacquie, una de sus nietas: su nona siempre se refirió a Rosa Parks con palabras elogiosas.
Así que vayan, pues, una mini semblanza de cada una de estas dos mujeres negras de vidas paralelas, como quiera que fueron coetáneas, que en su momento cada una se enfrentó sola al infame statu quo, que murieron nonagenarias y que sus trascendencias históricas fueron gubernamentalmente reconocidas en el ocaso de sus vidas: la una, con la Medalla de Oro del Congreso; y la otra, con la Medalla Presidencial al Ciudadano.

ROSA PARKS
Rosa Louise Parks, cuyo nombre de soltera fue Rosa McCauley, nació el 4 de febrero de 1913 en Tuskegee, Alabama. De niña asistió a la Highlander Folk School, un centro educativo para negros que propendía por la igualdad racial y los derechos del obrero. Desde muy joven fue una costurera, hasta cuando en 1950 se unió al movimiento estadounidense por los derechos civiles, empleándose como secretaria de la «sucursal» en Montgomery de la Asociación Nacional para el Avance de la Gente de Color (NAACP, por su sigla en inglés).
El 1º de diciembre de 1955 Rosa Parks abordó un bus urbano de Montgomery y se sentó en el único puesto desocupado que quedaba, el cual estaba en la sección destinada para negros. Más adelante abordó el bus un hombre blanco, quien no le puso problema a tener que viajar parado. Sin embargo, cuando el chofer se percató por el retrovisor de dicha escena, le gritó a Rosa Parks que le cediera el puesto al blanco y se largara bien al fondo, que porque así lo dispone una de las leyes del estado. Como Rosa se negó, el chofer recurrió a la policía y la arrestaron, lo cual provocó las protestas que lideró el reverendo doctor Martin Luther King, Jr.
Rosa Parks fue enjuiciada por «conducta desordenada y violación de una ley local» en una corte estatal, que la condenó a prisión y le impuso 14 dólares de multa. El año siguiente (1956) la Corte Suprema federal admitió revisar el caso «Rosa Parks versus Alabama», y en su dictamen declaró inconstitucional la segregación racial en el transporte.
Convertida en un icono del Movimiento por los Derechos Civiles, Rosa Parks se mudó a Detroit (Michigan) a comienzo de la década siguiente. En 1965 el representante demócrata por Michigan, John Conyers, le consiguió allí un empleo, el cual desempeñó hasta 1988.
Como no faltaron quiénes pretendieran «pordebajearla» calificando su rebelión contra la segregación racial en el transporte como un acto de mala conducta motivado por el cansancio de una simple costurera, Rosa Parks escribió en su libro autobiográfico My Life que sí estaba cansada pero, no sólo en un sentido físico, sino mucho más en un sentido emocional: estaba cansada (o sea: jarta) de ceder.
En 1994 irrumpió en su casa de Detroit un hombre negro, de nombre Joseph Skipper, quien le exigió entregarle el dinero que tuviera. Ella le entregó los tres dólares «que llevaba encima», pero Spikker le espetó que debía tener más dinero en esa casa. Rosa «se resteó» entregándole los otros 50 dólares que guardaba para paliar alguna contingencia pero entonces, disgustado por un botín tan «pírrico», el asaltante la agredió.
Cuando la prensa informó del incidente, lo que más causó estupor fue el relato de que Rosa Parks le preguntó si sabía a quién estaba violentando, y que Skipper respondió que no y que le importaba un comino quién demonios era ella. Joseph Skipper fue juzgado y condenado a 15 años de prisión, y en la cárcel admitió que sí tenía claro en casa de quién estaba entrando, por lo cual manifestó que deseaba que Rosa Parks viviera cuando él saliera del penal para poderse disculpar, y que aspiraba a que Rosa Parks lo perdonara aunque él no lo mereciera.
En 1979 a Rosa Parks se le otorgó la medalla Spingarn, que es el reconocimiento más alto que confiere la Asociación Nacional para el Avance de la Gente de Color. En 1980 fue galardonada con el premio nacional Martin Luther King, junior. En 1983 fue incluida en el Pabellón de la Fama de las Mujeres de Michigan. Y en su honor, en el año 2000 fundaron el Museo y Biblioteca Rosa Parks. Todos estos reconocimientos fueron por su protagonismo en la defensa de los derechos civiles de los negros.
Y a nivel gubernamental, en 1999 se le otorgó la Medalla de Oro del Congreso, que es la más alta condecoración que el Congreso de los Estados Unidos confiere a los civiles, en la cual acuñaron su efigie, su nombre y esta frase: Madre del Movimiento Moderno por los Derechos Civiles.
En el 2004 le fue diagnosticada demencia progresiva y murió el lunes 24 de octubre del 2005 en su casa de Detroit, a la edad de 92 años y ocho meses. Entonces, el Congreso de los Estados Unidos decretó que su cadáver fuera velado en el Capitolio durante los días domingo 30 y lunes 31 de ese mes, convirtiéndose en la primera mujer y en la segunda persona de raza negra en recibir tal homenaje, que antes de ella y desde 1852 sólo habían recibido 28 personajes (principalmente ex presidentes y héroes de guerra; incluso, Pierre L’ Enfant, el arquitecto que diseñó la ciudad de Washington D. C.).
Ante su féretro, el líder de la minoría demócrata del Senado, Harry Red, pronunció estas palabras: El movimiento que Rosa Parks ayudó a promover no sólo cambió a nuestro país sino también al mundo entero, porque sus acciones dieron esperanza a cada individuo que luchaba por sus derechos humanos y civiles.

IRENE MORGAN
Irene Morgan Kirkaldy, cuyo nombre de soltera fue Irene Amos, nació en 1917 en Baltimore, capital de Maryland, y a los 15 años debió abandonar los estudios para ayudar al sostenimiento familiar. Se apellida Morgan Kirkaldy por su primer esposo, Sherwood Morgan, quien falleció en 1948; y por su segundo esposo, Stanley Kirkaldy —con quien se casó poco después de muerto Sherwood Morgan—, quien falleció nueve meses antes de que ella falleciera.
En julio de 1944, a la edad de 27 años, perdió un bebé por un aborto involuntario. Para recuperarse física y emocionalmente de ese trauma, viajó de Baltimore, su ciudad de residencia, a Gloucester (Virginia), para pasar unos días con su madre.
En aquel entonces, una ley del estado de Virginia exigía que las personas negras debían ubicarse al fondo de los buses o los trenes y, si una persona blanca abordaba alguno de estos dos vehículos y no había un puesto libre, una persona negra tenía que cederle el suyo. Y en todo caso, en un mismo asiento no podían viajar una persona blanca y una negra.
Al comienzo de las cinco horas que duraba el viaje de Gloucester a Baltimore, una pareja blanca abordó el bus interestatal en el cual Irene Morgan regresaba compartiendo un asiento al fondo con otra dama negra que llevaba un bebé. Como todos los asientos estaban ocupados, el conductor le dijo a Irene Morgan que tenía que ceder el suyo. Irene se negó y le dijo a su compañera que tampoco se moviera.
Entonces el chofer varió la ruta y se detuvo en una dependencia policial. Una vez informó a la autoridad del desacato, el sheriff, acompañado de uno de sus marshalls, ingresó al bus y le entregó un papel a Irene Morgan diciéndole que era la notificación de que estaba bajo arresto por romper una ley local, pero Irene lo rompió y lo tiró por la ventana. Entonces el alguacil saltó sobre ella y pretendió doblarle un brazo para inmovilizarla y ponerle las esposas, pero Irene se le zafó y lo pateó. Luego enfrentó al comisario, quien logró someterla sólo después de un intenso forcejeo; y eso, con la ayuda del alguacil recuperado.
(«Estaba dispuesta a que me arrestaran porque, cuando algo es anormal, hay que corregirlo», escribió más tarde en un ensayo, que fue releído en sus exequias. Y en el año 2000, 56 años después del incidente, le dijo al diario The Washington Post: «Como el policía me manoseó, le di un puntapié en un lugar muy complicado».)
Irene fue enjuiciada por una corte estatal, que la condenó a prisión y le impuso 110 dólares de multa: 10 por violar una ley local, y 100 por resistirse al arresto. La comunidad negra de Gloucester «pasó el sombrero» entre sus miembros, y le recaudó a Irene Morgan los 110 dólares de multa. Irene pagó la multa por resistirse al arresto y les devolvió los otros 10, porque se negó a pagar la multa por violar una ley infame.
El abogado negro Thurgood Marshall apeló el fallo ante el Tribunal Supremo del estado, el cual lo confirmó. Entonces Thurgood Marshall apeló esta decisión ante el Tribunal Supremo federal, y el 3 de junio de 1946 éste declaró inconstitucional la segregación racial en el transporte interestatal. Curiosamente, no por considerar que aquélla violaba la decimocuarta Enmienda, sino por considerar que violaba una cláusula de la ley que reglamentaba el comercio entre los estados de la Unión.
(Veintiún años después, en 1967, el presidente Lyndon Johnson, en consonancia con su política de derechos civiles, nominó para el Tribunal Supremo a Thurgood Marshall y, a pesar del conato de «tormenta política» que se desató en el sector social más conservador, el Senado lo convirtió en el primer juez negro de la Corte Suprema de los Estados Unidos.)
Sin embargo, la proscripción de la discriminación racial en el transporte interestatal a menudo sería desacatada en el sureste del país, y sólo vendría a ser efectiva sin esguinces a partir de 1956 cuando la Corte Suprema federal, al revisar el caso «Rosa Parks versus Alabama», la proscribió en todos los medios de transporte de toda la nación.
Años después de revisado el caso «Irene Morgan contra el estado de Virginia», en más de una ocasión Irene Morgan se rehusó a aceptar doctorados honoríficos, aduciendo que no merecía tan alta distinción en razón de su escasa formación.
Con el tiempo dejó de lamentar no haber tenido una mejor formación académica formal y retornó a los estudios, por lo cual en 1985, a la edad de 68 años, accedió a un diploma de pregrado; y en 1990, a la edad de 73 años, accedió a una maestría.
(«A todos los que dicen que son muy viejos para regresar a los estudios, les recuerdo lo que mi madre hizo a tal respecto», dice su hija, Brenda Morgan Bacquie.)
En el año 2001 el presidente William (Bill) Jefferson Clinton le otorgó la Medalla Presidencial al Ciudadano, que es la segunda más alta condecoración que el gobierno federal confiere a los civiles. (La primera, claro está, es la que en 1999 se le confirió a Rosa Parks: la Medalla de Oro del Congreso.)
Cuando se casó con su segundo esposo, Irene y él se trasladaron de Baltimore a la ciudad de New York, donde a lo largo de los años se ganaron el sustento montando un negocio u otro; como, por ejemplo, un servicio de limpieza y un centro para cuidar niños mientras los padres trabajaban (o paseaban).
En el 2002 se trasladaron a Gloucester, donde 58 años antes ocurrió el incidente, y el viernes 10 de agosto del 2007 (hace casi once meses) falleció por complicaciones del síndrome de Alzheimer. Tenía 90 años.
Ahora bien: en los cuatro documentos sobre Irene Morgan «bajados de Internet» como apoyo para el garrapateo de este texto, no aparecen el mes ni el día de 1917 en que nació Irene Morgan, ni el día de julio de 1944 en que ocurrió el incidente. Y sobre todo, no hay mención de que a esta mujer, que es precursora de la Madre del Movimiento por los Derechos Civiles —que es como se denomina a Rosa Parks—, se le hubiera hecho al menos un reconocimiento adicional a la Medalla Presidencial al Ciudadano.
Esto es: no se menciona que fue condecorada por la Asociación Nacional para el Avance de la Gente de Color, ni que se le otorgó el premio nacional Martin Luther King, Jr., ni que fue incluida en alguno de los Pabellones de la Fama, ni que se «bautizó» con su nombre una Biblioteca y un Museo, ni que el Congreso de los Estados Unidos decretó que en el Capitolio velaran su cadáver.
Y si no encontró mención de todas estas distinciones, que a Rosa Parks sí le tributaron, el autor colige: o bien que en Estados Unidos consideran que Irene Morgan no las merecía, o bien que sí se las tributaron pero la información «bajada de Internet» deja mucho qué desear al no registrar esos eventos.
(Claro que el lector podría inferir que el autor de este escrito no sabe «bajar» información, que es lo más probable.)


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A propósito de que la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia le concedió a Yidis Medina el beneficio de detención domiciliaria, «el suscrito» Director no entiende por qué a eso lo llaman «beneficio». Pues, si al condenado se le concede dicho «beneficio», debe convertir su casa propia o arrendada en calabozo (porque imposible que un pariente se lo mame de arrimado para tener, además, que mantenerlo y convertir su rancho en calabozo), debe costearse su «bitute» y pagar el consumo de energía eléctrica y del agua que beba y demande su aseo personal. Pero, sin el susodicho «beneficio», el Gobierno tiene que «hospedarlo», alimentarlo y pagar su consumo de agua y luz, con la plata de los contribuyentes colombianos.
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El sábado de la próxima semana (5 de julio del 2008), la Universidad Francisco de Paula Santander cumplirá 46 años de fundada. Y un día después se cumplirán tres años del salvaje despojo de media hectárea de su campus, ordenado por el entonces alcalde de Cúcuta, Ramiro Suárez Corzo, hoy recluido en una cárcel bumanguesa, imputado de ser el autor intelectual de un asesinato.
¿Será que allá (en su encierro), tan siniestro personaje es asiduamente visitado por quienes aquí le rendían pleitesía «por todos los favores recibidos»? Y sobre todo, ¿será asiduamente visitado por los egresados de la UFPS que eran concejales y le aplaudieron, con su silencio o con el ruido de sus manos, el robo contra la Universidad que los formó?
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N O T A S :

Cualquier nota que no tenga explícitamente autor, debe ser
atribuida exclusivamente al director de Occidente Universitario.

Por limitaciones pecuniarias, las ediciones «en papel» de
Occidente Universitario, que se difunden completamente
gratis, es de 40 ejemplares, en promedio.

La edición Nº 93 de Occidente Universitario saldrá
(probablemente) el viernes 25 de julio del 2008.
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